viernes, 29 de julio de 2011

Hoy es Viernes

En casa, sin pantalones, comiéndome un magnum clásico y una cerveza fresquita encima de la mesa. ¿Qué más se puede pedir?

martes, 26 de julio de 2011

8 malditos días

Obsesionarse puede llegar a ser un problema. Pero en mi cabeza solo suena una canción: 8 malditos días más. Ocho. Ocho. Ocho. Mañana serán 7. Y el viernes sólo 5. Pero de momento, ahora, todavía son 8.

Metería una bala entre ceja y ceja ahora mismo a cualquiera, se negara o no a reproducirse para perpetuar su especie. Quiero que el odio estalle y lo manche todo de azul oscuro.

Pero ya no soy una cría. No me queda otra que aguantar.

lunes, 25 de julio de 2011

Creo que me apago

Hacía siglos que no tenía tanto cansancio acumulado. Al mental, que es el que más agota, se le suman partidos de fútbol y pocas horas de sueño, además de la jornada partida de la que ahora disfruto. Un caos. Creo que me apago como una cerilla, poco a poco quedándome sin oxigeno que quemar, vago cual zombie por los sitios simplemente esperando que esta situación cambie.

Pero atentos que aquí viene el bombazo. Dentro de dos lunes lo dejo. Y prometo solemnemente no volver a quejarme nunca de mi profesión, ni volver a pensar que preferiría estar trabajando de otra cosa. De hecho, no quiero volver a trabajar en nada que no sea lo mío nunca más. Y voy a estar lo suficientemente atenta para no tener que vivir de la improvisación diaria jamás de los jamases. Aunque, para qué engañarnos, seguramente sea imposible.

Pero sobreviviré a esto. A esto y más. Porque la fuerza me acompaña. La gravitatoria. Y de momento, me tira al suelo para que duerma un rato. Espero que eso me ayude.

sábado, 23 de julio de 2011

Extraña sensación

Levantarte un día cualquiera y darte cuenta de que estás invadida por una extraña sensación. Una sensación de vacío, desasosiego, ansiedad. Una sensación de necesidad.

"Vivo exclavo de la intensidad, vivo de la necesidad".

Esa extraña sensación que tienes días concretos, de tener muchas cosas importantes que decir y compartir, y que nadie esté muy dispuesto a escucharte. Esa extraña sensación de sentirte solo.

"Si no te vuelvo a ver, no quiero despertar; la realidad no me abandona."

Esa sensación de querer sentirte importante para alguien. De querer dar y recibir. De sentir que estamos hechos para sintonizarnos y disfrutarnos. De sentir.

"A cobro revertido quisiera hablar contigo, y, así, sintonizar."

La sensación de necesitar impresionarte. De querer y no poder llegar a ti.

martes, 5 de julio de 2011

Rabia

Hace tiempo me prometí a mí misma rodearme solamente de gente que me hiciera sentir bien, y alejar esas personas que me produjeran insatisfacción, frustración o rabia.

Cuando te ríes de una persona en su cara en vez que empatizar con su situación no esperes que la otra persona aplauda. Ni siquiera que siga teniendo ganas de hablar contigo. De hecho, agradece que no te escupa en la cara.

Te puedes pasar 8 años con una persona viviendo a 20 km de distancia, que es normal. Nadie da ningún paso en su vida pero todo tendrá sentido. Comparte tu vida con una persona que esté un poco más lejos y tu vida será un chiste.

Será que mi manera de entender las cosas es diferente, que la influencia de las experiencias en mí ha tenido un efecto más oscuro, que crecí entendiendo lo difícil que era y lo mucho que hay que luchar para estar con quien quieres. Quizá es eso.

Hay que luchar mucho para estar con quien quieres. Y no voy a permitir que nadie ridiculice mi lucha, la infravalore, la menosprecie, le quite valor. Y si tengo que elegir entre la gente que me hace sentir bien, y la gente que me produce rabia, tiraré de estas últimas por la cuneta a quien haga falta.

Nunca deberíamos reírnos de los sentimientos de nadie, por absurdos que parezcan.

viernes, 1 de julio de 2011

Es hora de tomar responsabilidades

No siempre pueden hacer todo por mí.

Y yo que sólo quiero jugar a fútbol e irme de la ciudad.