viernes, 25 de agosto de 2017

Una parte de mí

He perdido una parte de mí, una grande e influyente. Como si me arrancaran un brazo, o una pierna, o si me quitaran algún órgano. He perdido una parte de mi ser, de mi alma. De todas esas cosas espirutuales que nunca he sabido si existen, y ahora siento parte de mí.
He perdido la fe, el hambre, la ilusión. He luchado contra mí misma por perder hasta la tristeza.

He dejado una parte de mí en ese hueco, en esa cama, en aquel pasillo. Y me siento tan perdida que no puedo ni llorar, ni arrastrarme, ni sufrir. No puedo estar triste ni estar en paz. No puedo ni pensar ni levantarme ni caer.

No puedo ni echarte de menos. No puedo ni arrancarte ni avanzar.

No puedo entender.

No hay comentarios: